CASOS DE VIAJES A OTRA DIMENSIÓN: TESTIMONIO #1 - CASO LINCE






TESTIMONIO #1

Nombre del testigo: César Alberto Zárate Huamaní
Edad: 31 años
Nacionalidad peruana
Profesión: Técnico en enfermería del Miisterio de Salud
Lugar del evento: Av. Canevaro, Lince, Lima (Perú)
Fecha: Domingo 5 de marzo de 2017
Hora del hecho: 1 pm. aproximadamente

Fuente:
Investigador: Anthony Choy
Programa: Viaje a otra dimensión

Visita nuestras redes sociales:

Facebook: www.facebook.com/blogexpedienteoculto
Twitter: @ExpedienteOcult



El domingo 5 de marzo de 2017, César Alberto Zárate Huamaní (31 años), técnico de enfermería del Ministerio de Salud; se encontraba con su prima Laura Huamaní Córdova (38) y el hijo de ésta de 2 años de edad, en el centro comercial Plaza Lima Sur, ubicado en el distrito de Chorrillos, cuando alrededor de las 12:30 pm tomaron un taxi para dirigirse a un Banco de la Nación ubicado en la avenida Arequipa. 

Luego de sacar dinero de un cajero a eso de las 1:15 pm. decidieron cruzar la avenida Javier Prado para ir al Centro de Lima. Se dirigieron a la avenida Petit Thouars​ y tomaron un taxi marca Tico de color amarillo.

El chofer era un hombre blanco, delgado y alto. El auto avanzó una cuadra, luego volteó, dirigiéndose a Lince. Fue en ese momento en que César se percata que fuera del vehículo aparecían edificios extraños para la zona, construcciones que jamás había visto en la capital. Los edificios eran altos (tanto que parecían no tener fin), plateados y brillantes. Él le avisó a su prima y ella también los observó. Lo extraño es que en ese momento, la calle se encontraba completamente vacía, ni autos ni gente, tampoco había ruido, todo estaba en completo silencio.

César pensó que se encontraba en el distrito de San Isidro, caracterizado por ser el centro financiero de la ciudad y tener edificios modernos y de más de treinta pisos de altura, sin embargo, éstos no eran tan altos ni tenían la estructura que el testigo veía en ese momento.

Tanto su prima como el taxista enmudecieron. Después de unos minutos, el niño comenzó a llorar. Fue entonces que el taxista, de muy malhumor, les dijo a sus pasajeros que bajen del vehículo, que ya habían llegado a su destino. Algo que era mentira pues no se encontraban en el Centro de Lima.

César abrió la puerta. Sacó su billetera para pagarle al taxista, le pagó con 20 soles, pero el taxista le pidió que le diera un billete de menor denominación porque no tenía cambio. Fue allí cuando César notó que el taxista había cambiado de forma, como si se tratara de otra persona. Ahora era un hombre más pequeño y vestía una ropa plateada. Aunque sorprendido, César sacó un billete de diez soles y cuando levantó la vista, el auto había desaparecido.

Asustado. César se percató que todo había vuelto a la normalidad. Que los edificios eran los tradicionales de la zona, y las personas, los autos y el ruido aparecieron de pronto. César y su prima también notaron que el taxista los había dejado a una cuadra de donde había tomado el taxi. César, sin saber muy bien lo que había acabado de vivir, llamó a su primo para que lo recogiera.  Tanto su prima como él, no entendieron que habría pasado.


Según el testigo, también sufrió una especie de pérdida de tiempo, porque al ver su celular, eran las 3:15 pm.  Es decir, César, su prima y su sobrino, habrían pasado cerca de una hora en el taxi, algo imposible, porque como relata, el auto lo dejó a pocos metros de donde había tomado la carrera. 

Comentarios

Entradas populares