CASOS DE ABDUCCIÓN #9: EL CASO DE JUDY DORATY Y LA MUTILACIÓN DEL GANADO

En mayo de 1973, en el estado de Texas, Estados Unidos, ocurrió un caso que involucra dos temas muy populares y a la vez polémicos del fenómeno ovni: la abducción y la mutilación de ganado.

Aquel año, cuatro mujeres llamadas Judy Doraty, su hija Cindy, su suegra y su cuñada, regresaban de noche luego de jugar bingo en Houston cuando se encontraron con una luz extraña, de color amarillo, que parecía flotar en el cielo. Esta luz no emitía ningún sonido. Doraty la describió como "un gran foco de luz, como si estuviera buscando algo... pero no se movía, estaba estacionada en el cielo".

Al ver esta luz, las cuatro mujeres deciden bajarse del coche para poder observarla mejor. Sin embargo, después de un rato, la luz desparece, así que las mujeres reanudan su viaje.

Síntomas e hipnosis

Tal como hemos visto en varios casos de esta serie dedicada a las abducciones, la mayoría de personas que tienen este tipo de encuentro, luego suelen presentar algunos síntomas que dañan su salud. En el caso de Judy, luego de este encuentro comenzó a sentir fuertes dolores de cabeza y una gran ansiedad, síntomas que ningún doctor pudo resolver. 

Al no encontrar una solución para su problema, Judy fue a buscar la ayuda del hipnotizador Leo Sprinkle. Ella le contó lo que había vivido y Sprinkle decidió hacerle una hipnosis regresiva. 

Fue allí cuando Judy le relató mucho más de lo que ella creía que había vivido. Ella dice que se ve como si estuviera en dos lugares al mismo tiempo: a un lado de la carretera, junto a su auto viendo esas luces y por el otro, se encuentra dentro de una nave. 

Abducción y mutilación de ganado

En la carretera, Judy ve un haz de luz que cae sobre un becerro marrón con blanco y que al tocarlo, lo hace flotar en dirección hacia el objeto. Luego de esta visión, Judy se vio dentro de la nave y vio cómo el ternero era llevado a una pequeña habitación redonda en donde humanoides de no más de 1.20 metros de altura, con piel grisácea y grandes cabezas que ella describe con "forma de huevo", comenzaron a cortar al becerro por partes: la boca, los órganos sexuales, los ojos, etcétera.

Luego, el animal, es devuelto a la tierra pero ya sin vida.

Judy dice que al ver lo que hacían con el animal se indignó y fue allí que los seres notaron su presencia pero de alguna forma la ignoraron mientras ellos continuaban haciendo su trabajo. Luego de esto, Judy fue dejada nuevamente a un lado de la carretera.