CUENTO DE TERROR: EL DEMONIO DE LOS OJOS ROJOS DE PERCY TAIRA M.


Por Percy Taira M.

Recuerdo aquella nefasta noche como si fuera ayer. A pesar de ser invierno, el frío no era tan penetrante como solía serlo en esta ciudad, así que me dispuse a continuar con mis estudios de las artes oscuras, para ello, saqué de mi biblioteca el Ars Maleficarum, un vetusto libro del siglo XV y cuyos conjuros son tan terroríficos y efectivos que fue prohibido incluso entre los nigromantes de la época. 

Comencé la lectura de un hechizo referido a la transfiguración de los cuerpos cuando sentí detrás de mí, una presencia que me observaba desde el librero. Acostumbrado a los engaños de la sugestión mientras realizaba este tipo de estudios, no hice caso de aquel malestar hasta que escuché unos breves pasos provenientes del mismo lugar. Detuve mi lectura y, aún sin voltear, presté atención a aquel ruido. Era evidente que aquello no era producto de mi imaginación, así que dejé a un lado el libro y volteé a ver la biblioteca para encontrar al responsable de aquellos golpes. Fue en ese momento cuando lo vi. En un principio sólo pude distinguir en la oscuridad de mi habitación una negrísima sombra arqueada sobre la parte superior del mueble, pero luego, cuando la bestia comenzó a moverse de un lado a otro, pude distinguir la figura de un gato negro que me observaba con dos refulgentes ojos rojos.

Observé su deambular sin moverme, esperando algún tipo de reacción por parte de la criatura. De pronto, se detuvo, y con un rápido movimiento que me inquietó, se precipitó al suelo y luego dio un gran salto hasta mi escritorio. Ahora lo tenía al frente, a unos pocos centímetros de mi rostro. Fue a esa distancia cuando noté con terror que el bermellón de su mirada se debía a la sangre contenida dentro de sus ojos. Aquella visión me repugnó. Intenté levantarme de mi silla y huir de mi habitación pero debido al temor que me produjo aquel animal, no podía moverme. Mi cuerpo había quedado detenido ante esos ojos sangrantes que me miraban como si juzgaran el peso de mi alma. El felino se acercó a mi rostro sintiendo mi respiración descontrolada y el sudor frío de mi frente mientras yo observaba esos ojos henchidos de sangre. No fue sino cuando el animal puso sus ojos delante de los míos y sentí el olor a sangre de los mismos, cuando mi cuerpo reaccionó de manera instintiva. Alcé mis manos y con violencia sujeté la pequeña cabeza del felino haciendo que mis palmas presionaran sus ojos hasta sentir que estos reventaban en mis manos. La criatura lanzó un grito desgarrador que me pareció humano, y arremetió contra mi cara con un certero zarpazo que le permitió escapar de mi ataque. El ser endemoniado huyó dando largos saltos hasta que desapareció atravesando una pared. 

Desde aquella noche no he vuelto a ver a aquel ser endemoniado, sin embargo, sufro en cuerpo y alma las consecuencias de aquel encuentro maligno. Las heridas en el rostro que me produjo aquella bestia no han cicatrizado, mi piel ha comenzado a ser invadida por un hirsuto pelaje negro y en mis ojos se expande el terror de la sangre como si detrás de ellos se escondieran las llamas del propio infierno.


CUENTO NARRADO POR EL PROPIO AUTOR




Percy Taira Matayoshi (Lima, Perú - 1982). Es escritor, poeta y periodista. En poesía, ha publicado los poemarios Bitácora (2002) y Puerta Azul (2008). En narrativa, ha publicado la novela de fantasía Relatos del Imperio de Qudor: La dama roja (2019). Ha colaborado en revistas literarias virtuales e impresas de Perú y en el extranjero.


Redes sociales:

Twitter: @PercyTaira
Facebook: www.facebook.com/PercyTairaM.Escritor
YouTube: www.youtube.com/percytaira
Instagram: @PercyTaira

Comentarios

Entradas populares