EL EXTRAORDINARIO CASO KERA: CUANDO UNOS NIÑOS ATRAPARON UN OVNI EN JAPÓN

Uno de los niños, Hiroshi Mori, mostrando el objeto encontrado

El caso conocido como Kera, debe ser uno de los casos más extraordinarios y a la vez, o quizá por eso, más increíbles, de la historia de la ufología mundial. En esta historia un grupo de niños logró lo que cualquier seguidor de esta fenomenología quisiera: atrapar un ovni para su estudio.

La historia

Fotografía del objeto sobrevolando el campo de arroz

El hecho ocurrió el 25 de agosto de 1972, en la ciudad de Kera, ubicada en la prefectura de Kochi, en la isla de Shikoku (Japón). Un niño, llamado Michio Seo (13) caminaba a las 3 de la tarde, de regreso a su casa cuando vio a un lado del camino a un pequeño objeto metálico sobrevolando un campo de arroz. 

El niño se acercó para ver mejor al objeto y notó que tenía una forma de sombrero, con una cúpula superior y una base plana. Según el niño, el objeto estaba a un metro sobre el suelo y realizaba unos breves movimientos. Al estar cerca de él, el objeto emitió un resplandor muy fuerte que asustó al niño, haciendo que este fuera a su casa.

Más tarde, a las 7 de la noche, el niño regresó al lugar pero esta vez acompañado de cuatro amigos, Hiroshi Mori, Yasuo Fujimoto, Katsuoka Kojima y Yuji. Para suerte del grupo, luego de una hora de espera, volvieron a ver a este objeto a unos 18 metros de distancia.

Uno de los niños se aproximó al objeto y este emitió una luz muy fuerte y un sonido muy fuerte. Los jóvenes nuevamente, temerosos, huyeron del lugar. Lo mismo pasó el 4 de septiembre, cuando los niños volvieron a toparse con este objeto y al ver que comenzaba a brillar intensamente, volvieron a huir.

La captura del objeto

Objeto capturado

Un hecho interesante ocurrió la noche del 6 de septiembre, cuando los testigos encontraron al objeto volador y lograron tomarle una fotografía. El objeto, quizá al sentir el flash de la cámara, se elevó rápidamente en el aire. Entonces los niños tomaron otra fotografía, y fue allí que el objeto emitió una luz y cayó al suelo originando un pequeño hoy en el terreno.

Fue entonces que Hiroshi Mori, de 14 años, se acercó al objeto y al ver que estaba como "apagado", decidió cogerlo con sus manos. Luego, metieron el objeto en una bolsa de plástico y Michio se la lleva a su casa. 

Base del objeto capturado


Ya en casa, los niños decidieron analizar el objeto. Este tenía 15 cm de ancho y 7 cm de altura y pesaba unos 1,3 kilogramos.Sin embargo, lo que más llamó la atención de los jóvenes es que este objeto tenía en la base, una serie de líneas concéntricos y dibujos, el de una ave, una especie de martillo antiguo y nubes. 

El objeto no presentaba motor, ventanas, o cualquier otra forma de propulsión, salvo, unos 31 pequeños agujeros en la base.

Los niños llevaron el objeto a la casa de su amigo Yasuo Fujimoto, pues su padre era el director del centro para la enseñanza de las ciencias en la ciudad de Kochi. El señor Fujimoto, no tomó con seriedad el hallazgo de los niños y simplente le dio una rápida revisada. Para él, no era más que un cenicero de hierro fundido, aunque declaró que era demasiado liviano para ser de este material.

Más encuentros con el mismo objeto

Para muchos no sería más que una parte de un cenicero

Lo curioso es que al día siguiente el objeto desapareció de forma inexplicable, y a partir de aquí la historia se vuelve más extraña aún, porque luego lo volvieron a encontrar (el 19 de septiembre), lo volvieron a capturar, le hicieron más pruebas (notaron por ejemplo lo duro que era pues era resistente a los golpes y que dentro tenía un complejo equipo electrónico, pero luego, y tal como sucedió la primera vez, el objeto volvió a desaparecer. Lo volvieron a encontrar una vez más, y nuevamente, volvió a desaparecer para no volver a encontrarlo jamás. 

Para muchos, a pesar de las pruebas fotográficas y testimoniales, el caso del ovni de Kera, no es más que una ficción. Es decir, si bien el objeto existió, la historia de que era un objeto volador, no sería más que un invento de los niños. Los escépticos consideran que no se trataría más que la parte de un cenicero. Además ¿cuántas veces puede tener uno la suerte de toparse con un mismo objeto volador y además, capturarlo todas esas veces?

Comentarios

Entradas populares